El pasado viernes se presentaron los prototipos de la primera edición de la convocatoria “Residencias artísticas: creación experimental para la justicia social”, una iniciativa de Fundación FEMSA en alianza con la iniciativa Artes del Tec de Monterrey y la Secretaría de Cultura de Nuevo León a través de LABNL.
Durante la presentación, el artista Rolando Jacob, quien lideró “Materializar el desajuste”, platicó los resultados de su proyecto, que explora el potencial que tienen los espacios habitables para funcionar como dispositivos de memoria continuos en donde las narrativas se deforman y se alteran.
Ahí, algunos participantes de su residencia explicaron cómo materializaron sus propios desajustes, convirtiéndolos en una pieza artística, como el caso de la obra “Cuarto de servicio”, de Paola Livas, un lavadero tallador dentro del cual reproduce a escala el que era el cuarto de servicio de su casa materna.
David Ordaz Bulos, con su proyecto “Microlaboratorio: Escenarios futuros sobre justicia social en Nuevo León”, mapeó las tendencias sobre la justicia social en Nuevo León para el 2033, y su página de proyecto menciona escenarios deseables de gobernanza y tecnología, como el siguiente:
“En el 2033 la inteligencia colectiva se ha detonado gracias a los avances de la tecnología que se complementan con los esfuerzos humanos para impulsar la democratización y la calidad de vida de la gente bajo un nuevo paradigma de desarrollo que respeta los límites del ecosistema, busca el buen vivir desde el decrecimiento en la medida de las posibilidades de la economía. Esta tecnología conocida como ANAA, es el resultado de una colaboración sin precedentes entre los gobiernos de diferentes países del mundo, con el objetivo de abordar la crisis civilizatoria que azota al planeta”.
Marcel del Castillo, con “Memoria y conocimiento. Imaginar el agua”, presentó una página web que reúne toda la información de este proyecto, el cual se basa en trabajar con la memoria y el conocimiento de comunidades del estado de Nuevo León para aproximarse al tema del agua desde otros saberes y experiencias en un contexto de estrés hídrico. La información puede consultarse en el sitio.
En el caso de Laura Curry, quien hizo el proyecto “Poesía para el bien común” con Ana Cadena Payton y Daniel Pérez Ríos, los asistentes pudieron ver el sitio donde se volcó la poesía de los habitantes de Monterrey, en el que pueden leerse frases como: “Eres cambiante, caótica y compleja. Pero dentro de tu locura cuando veo la belleza de tus calles, el cielo estrellado y tu encanto, encuentro respiro”, “Quiero caminar sin sentir miedo”, “Deja que el alma guíe tu destino”.
Con su proyecto “Sueños microfósiles. Forma y género”, Melissa García Aguirre exploró los vínculos interespecie y los sueños de una dignidad multimateria. Sus “formas y géneros” estuvieron a la vista en forma de microfósiles impresos en 3D, fotografías, dibujos y bitácoras de trabajo que realizó de manera colectiva con los participantes de su residencia.
Al evento de presentación realizado en el conversatorio de LABNL asistieron Laura Pacheco, Jefa de Registro de Obra y Bienal FEMSA de Arte y Cultura de Fundación FEMSA; Miguel González Virgen, líder de la iniciativa Artes Región Monterrey del Tecnológico de Monterrey, y la secretaria de Cultura de Nuevo León, Melissa Segura Guerrero.
Más información sobre cada uno de los proyectos está disponible en: