Analizar problemas complejos, súper complejos y comunidades catalíticas es uno de los temas a los que últimamente más tiempo dedica Will Sarni, fundador y CEO de Water Foundry, en colaboración con Tom Higley, cofundador y CEO de X Genesis, para poder encontrar soluciones que nos permitan mover el sector de agua y saneamiento a partir de soluciones que nos permitan hacer más y mejor de la forma más rápida posible.
No se trata de reemplazar los esquemas de acción colectiva sino de entenderlos mejor y analizarlos para identificar lo que se requiere hacer mejor y diferente para lograr resultados transformadores y de impacto. Es así como dio inicio la primera sesión del Foco en las Américas después de una breve introducción a cargo de Sergio Campos, Jefe de la División de Agua y Saneamiento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en la que nos recordó los retos sin precedentes que enfrentamos como región ante el cambio climático que requieren nuevos modelos de gobernanza de nuestros recursos hídricos.
Los problemas de agua son por naturaleza súper complejos debido a su naturaleza cambiante, reconociendo que ningún actor convencional o solo podrá resolver estos problemas complejos. Por tanto, necesitamos contar con una gran diversidad de grupos de interés. Necesitamos diversidad de voces, de perspectivas.
El sector público tiene escala, pero es lento para generar cambios. Los emprendedores son rápidos para generar cambios, pero no tienen la escala necesaria. Desde la perspectiva de Will Sarni, las organizaciones multinacionales se encuentran mejor equipadas para poder impulsar cambios transformacionales dado que pueden ayudar a alcanzar escala y generar cambios con rapidez. Todos en conjunto pueden ofrecer nuevas perspectivas de solución a estos problemas complejos.
Por su parte, Tom Higley resaltó que una comunidad catalítica tiene la necesidad de conjuntar distintas perspectivas con participación multisectorial que, sin embargo, tienen que estar alineadas para encontrar un espacio de colaboración en donde podemos crear algo único, nuevo, que puede ser desde una institución hasta un movimiento. En este sentido, los emprendedores pueden contribuir mucho en la forma en que se aborda la solución de estos problemas complejos.
Tom resaltó que hasta ahora no existen muchos ejemplos exitosos en el área de agua de este tipo de comunidad catalítica pero tenemos una oportunidad única para desarrollar soluciones nuevas aunque debemos comprometernos.
Después de estas intervenciones siguió una conversación en un panel con representantes de organizaciones que tienen experiencia trabajando en acción colectiva como Fundación FEMSA, la Organización Mundial Metereológica y el BID.
Stefan Uhlenbrock, director de Hidrología, Agua y Criósfera, mencionó que una forma en la que el cambio climático se expresa es a través de sequías e inundaciones, por lo que tener o incorporar sistemas de prevención temprana de riesgo es importante, lo que requiere en sí mismo contar con información de muy alta calidad con la capacidad de compartirla y crear e incorporar información a un nivel granular importante y detallado.
Por otro lado, Tom Higley comentó sobre la iniciativa 10/10/10 que involucra a 10 emprendedores, 10 problemas complejos y 10 días para analizar y procesar información que permitiera entender los problemas y buscar soluciones que pudieran resultar en proyectos en los que se pudiera invertir. Un “venture studio” crea las empresas desde una perspectiva de cofundación de empresas, no como una típica incubadora.
Fuente de Innovación es la forma en la que el BID ha tratado de impulsar la innovación en el sector de agua en América Latina y hemos encontrado que muchas veces las innovaciones requieren ser sostenibles no sólo innovadoras y para ello se requiere crear todo un ecosistema.
Al hablar de los aprendizajes y retos para escalar y medir el impacto de las distintas innovaciones en la acción colectiva, Ana Laura Elizondo, Jefa de Seguridad Hídrica de Fundación FEMSA, comentó que uno de los retos para escalar soluciones está relacionado con la decisión y la capacidad de asumir riesgos, dado que los proyectos pueden fracasar porque los contextos, las condiciones y las personas son distintas en cada lugar y eso puede hacer que las soluciones no funcionen o no se adecúen a los retos locales. Otro reto tiene que ver con el hecho de que estamos tan ocupados en hacer las innovaciones, en participar activamente en el análisis de los problemas y de sus soluciones que muchas veces no puedes invertir tiempo o dinero en registrar y compartir conocimiento con otros para que las lecciones aprendidas no se pierdan.
Stefan por su parte señaló el reto de la medición y evaluación para poder escalar ya que muchas veces necesitas adaptar soluciones que consideren las consecuencias impredecibles del cambio climático.
Es innegable que hoy nos enfrentamos a un momento crítico que requiere soluciones adaptables o flexibles para poderse adaptar continuamente de acuerdo con el entorno cambiante y por definición, eso impone un reto enorme a todas las organizaciones. Por ello, al generar soluciones, debemos rediseñar la forma en que establecemos nuestros supuestos y los conceptos de los cuales partimos, así como nuestros modelos de gobernanza del agua y nuestros mecanismos de comunicar de vincularnos entre los distintos actores a distintos niveles. Las soluciones locales son las que nos llevarán a resolver los retos globales de agua en el entorno de cambio climático.
Con el llamado al cambio al final de este panel, inició la segunda parte de esta sesión, liderada por Leonellha Barreto-Dillon, directora regional de CEWAS. Ahí se presentó un avance de un estudio coproducido por CEWAS y por el BID. En el marco de las comunidades catalíticas este modelo propone entender el sistema de innovación para resolver estos problemas complejos como un campo de futbol en donde los distintos sectores son uno de los 11 jugadores de un equipo de futbol, considerando que en el equipo los delanteros están compuestos por los innovadores, el sector privado y la empresa de agua o “utility” que provee el servicio para la población y el coach es un espacio que tradicionalmente lo asume el gobierno central.
En este sentido, el modelo propone distintas etapas en las que el sistema de innovación se puede dar, que van desde la concepción hasta el estado de madurez y en el que de acuerdo con cada fase, hay una serie de 8 componentes que se comportan de cierta forma. Con base en este modelo, se presentaron dos casos prácticos en los que se hizo un diagnóstico rápido.
Jose Antonio Torre presentó el caso de la Iniciativa de Innovación en Nuevo León. Durante su presentación detalló la crisis de agua en México y en Nuevo León y, en medio de ese entorno, explicó que para el Tec de Monterrey su papel en el tema de agua va más allá de sólo educación e investigación, al tomar como compromiso liderar y conducir la innovación. Al aplicar la herramienta presentada por Leonellha en el esfuerzo del Tec, se pudieron identificar 4 pilares de enfoque para el trabajo del Tec de Monterrey en esta primera etapa de la Iniciativa.
Por su parte, la Organización Mundial Metereológica presentó el caso de las “InnovationCalls” que es una forma de generar respuestas innovadoras a algunos retos que presentan los Sistemas Nacionales de Meteorología e Hidrología a nivel mundial que en muchas ocasiones se refieren a aspectos tecnológicos, pero que deben ser de bajo costo y de acceso abierto. Se especifica que la creación de alianzas entre emprendedores, ONGs y las organizaciones de gobierno son una característica necesaria. En este sentido, al aplicar el modelo propuesto, nos dimos cuenta que un área de oportunidad para mejorar el programa se refiere a establecer mecanismos más innovadores de financiamiento, al tiempo que existe un área de oportunidad para influir en la generación de marcos regulatorios que favorezcan los procesos de innovación a nivel local.
Esta sesión finalizó con una reflexión colectiva en la que se resaltó la necesidad de tener claridad de propósito sobre los cambios y las innovaciones. No es fácil trabajar en la solución de problemas complejos, pero es una tarea compartida que tenemos en la que todos debemos participar para lograr un futuro con agua.